En el marco de la globalización, es fundamental reflexionar sobre la desigualdad no solo a nivel nacional, sino como un problema a escala global. Branko Milanovic analiza la desigualdad global, es decir, la disparidad de ingresos entre los habitantes del mundo, como resultado del ciclo de Kuznets, que consiste en la fluctuación de las desigualdades dentro de los países y la convergencia del ingreso promedio entre ellos. A través de exhaustivas investigaciones, Milanovic arroja luz sobre los principales cambios políticos y económicos mundiales de los últimos dos siglos, especialmente del siglo XX. A partir de 1989, con la caída del Muro de Berlín y el retorno de los países excomunistas al sistema económico global, el autor analiza el crecimiento y la disminución de la desigualdad a través de movimientos cíclicos impulsados por conflictos, enfermedades, avances tecnológicos y el acceso a la educación. Las incógnitas planteadas a lo largo de su obra buscan dilucidar cuál será el destino de la democracia y de las economías en desarrollo frente al grave panorama de desigualdad de ingresos que ha predominado en los últimos dos siglos.