La vigilancia constante a Karl Marx por parte de la policía secreta y otros informantes es un hecho bien conocido pero a menudo pasado por alto. Este texto recopila informes que revelan cómo Marx y sus allegados estuvieron constantemente bajo escrutinio por parte de las autoridades, quienes buscaban conocer sus pensamientos, palabras, acciones y omisiones. A lo largo de la historia, diversos gobiernos han mostrado un interés particular en seguir los pasos del autor de El Capital. El libro recoge ejemplos de esta vigilancia desde una perspectiva historico-política y antropológica, mostrando cómo agentes, funcionarios del Estado, periodistas e incluso supuestos revolucionarios se dedicaron a espiar a Marx. Esta lectura resulta muy reveladora, ofreciendo un vistazo a prácticas de espionaje que siguen presentes en la sociedad actual.