En esta obra se busca explorar de forma distinta la vida de tres mujeres emblemáticas: Juana de Arco, Juana I de Castilla y Sor Juana Inés de la Cruz, destacando aspectos ignorados en sus historias convencionales. Estas figuras representan cualidades como la honestidad, la claridad, la sensibilidad, la inteligencia, el amor por sus causas y la perseverancia en sus logros. El texto propone reflexionar sobre nuevas narrativas que promuevan valores más elevados, más allá de las intrigas y ambiciones del poder, superando la envidia y el odio que intentan opacar las virtudes que nos definen como seres humanos.