El estudio del análisis político institucional sobre la gestión del poder, abordó los desafíos y obstáculos que enfrentaron los partidos progresistas cuando accedieron al gobierno. Se toman como ejemplos representativos los dos mandatos de Luiz Inácio Lula da Silva en Brasil (de 2003 a 2006 y de 2007 a 2010), y su relación con el Partido de los Trabajadores (PT). Se examina la manera en que un partido político con una agenda progresista radical de redistribución socioeconómica y democracia participativa, al llegar al poder, puede cambiar hacia una política económica ortodoxa, establecer alianzas con partidos conservadores en el legislativo, modificar su vinculación con los movimientos sociales y relegar la participación de la agenda a un segundo plano, todo en beneficio propio para obtener apoyo internacional y aplicar políticas sociales progresistas.